viernes, 19 de septiembre de 2008

Si me besas no sé que va a pasar...

por Hudson

Estas horas no son horas, pero las lagrimas son reales. Las palabras son agujas que penetran sin parar, sin gotas que se derramen ni ecos que se desvanezcan, agujas que marcan los días en un calendario de un tiempo que pasa arrastrándose en esa realidad en la que tus ojos se fueron y dejaron un espacio sin materia donde no cabe nada que tengamos en este universo.

El vacío se traga todo, las moléculas que juegan y el canto de las golondrinas y las almas de los caminantes y las canciones de las viudas. Es una larga tubería hasta el fondo del abismo, allí desde donde la cima se ve tan radiante. Sé que en un lugar que no esta en ninguno de los dos extremos, ni en el centro, ni fuera de él, un lugar entre la línea tangente a este abismo, esas nubes y esa caída tan larga y tan eterna pasan a ser un punto del siguiente plano antes que una gigantesca circunferencia que envuelva esta tosca y árida vida en la que se me pasan los días y no me da el corazón la oportunidad de tomarte cariño. Sé que en ese lugar me esperas, me esperas sin saber que me esperas, me esperas sin saber que esperas algo, te quedas entre el aire, entre las olas del aire y te bañas de música muda, en letras que lees en el papiro invisible de mis deseos, de mis ansias de decirte lo que todavía no tengo permiso para decirte.

Maldita moral, que se lleve mis sueños, que se los lleve lejos, tan lejos que ni siquiera ella pueda regresar y deje el camino libre para que yo pueda caminar hasta tu banca y decirte al oído cuanto te he extrañado. Y si corres, tendré la muerte entera para seguirte, y si gritas, martillaré tu voz hasta hacerla sinfonía, y si ríes, fotografiaré tus labios, y si me miras con tu rostro perplejo, con tu carita pintada de viaje sin brújula, te besaré o moriré en el intento, y si me besas, si me besas…

Si me besas no sé que va a pasar, hasta allá no me llega la imaginación.

1 comentario:

Anónimo dijo...

muy buen final