sábado, 9 de febrero de 2008

Amor… ¿Alguien puede saber qué es?

por Karla Rosso

Alguna vez te has puesto a pensar ¿Cómo saber con certeza cuándo se esta enamorado? , “quizás” puede ser una respuesta inmediata; pensarlo un poco más nos llevaría a un “No se piensa, se siente”.

Somos seres dotados de sentidos y como tales, podemos concebir el amor en el aire, esto nos embriaga, nos enferma (estado de insomnio y sin apetito), nos hace poetas, extrae características que en un estado de desamor se convierten en idioteces… Tú que estás leyendo estas líneas podrás estar imaginando, “Ese no es mi caso, aún no me ocurre eso que se llama Amor” y ¿sabes hasta cuándo estarás libre del contagio mas antiguo del mundo?, de ese para el que aún no encuentra un remedio la ciencia… El Amor.

Comencemos haciendo memoria de los síntomas, de cierta manera saberlos ayudaría a descifrar si padecemos el virus. Inicialmente, pulso acelerado, pérdida del apetito, respiración agitada, manos sudorosas, falta de coordinación de movimientos, nerviosismo, tendencia al tartamudeo. El cuadro general del paciente puede adquirir ribetes realmente graves si se presenta la complicación denominada amor primo visu (amor a primera vista). ¡No te asustes!, Se puede sobrevivir. Los médicos no han logrado descubrir ninguna relación entre estar enamorado y la muerte súbita.

Una vez, ya comprendiendo los síntomas, te formulo la misma pregunta, ¿Te has enamorado alguna vez? o talvez lo estés ahora, ¿quien sabe?.

Definir como tal la palabra amor; es algo muy personal, basado en la realidad vivida y adquirida y a su vez muy compleja. Indagando en mi baúl, encontré 4 verbos que se relacionan con el amor en un libro, precisamente llamado “Amor”, que tiene un autor anónimo. Estos fueron: Conocer, Aceptar, Respeto, Ser uno. Te parece si analizamos ¿qué semejanza tienen?

CONOCER: Diferencia entre atracción y amor pasa por una cuestión, ante todo, de tiempo. Difícil resultaría amar a quien no se conoce, tener claro las fortalezas y debilidades del ser que nos enamora, sus gustos, anhelos, inquietudes etc. Una vez que esto pasa a nuestro conocimiento aparece el segundo verbo.

ACEPTAR: “Te amo cuando me haces sentir bien”, y ¿cuando eso no ocurre?, ¿aceptamos?, el aceptar las virtudes es fácil y llevadero. Las manías, la diferencia de caracteres, el pasado personal, etc., eso se torna complicado cuando no conocemos al ser que nos acompaña. Para ello debemos partir aceptándonos a nosotros mismos; nuestro cuerpo y alma. Si no lo hacemos, ¿Con que armas contamos para poder hacerlo con el resto? El aceptarlo implica llegar al siguiente verbo.

RESPETO: ¿Podemos reclamar respeto si nosotros mismos no lo hacemos?, este verbo es fundamental. No se pide entender razones o cambiar de opinión, si no que escuchar y respetar, tanto en acciones como en voz. El ser humano responde a estímulos los cuales con delicadeza y comprensión son mejores receptados que uno practicado rompiendo la frontera del RESPETO, el no hacerlo, nos convierte en aire violento con resultados frustrante; tanto como dejar nuestra propia forma de ser sensata para pensar con calma.

SER UNO: Tratar de agradar a ese alguien dejando de lado ser uno, seria arriesgadamente perturbador; preguntarás ¿Por qué?, bueno, porque ese alguien quizás se enamore de alguien que no eres, un personaje que tú creaste a imagen y semejanza de lo que el otro quería tener, en pocas palabras, algo ficticio, falso. La verdad y naturalidad ante todo.

El amor un sentimiento natural, existente alimentado y cosechado en el ambiente. No le pongas pesticidas, la falsedad de los químicos lo mataran rápidamente.

Mis dedos plasman este pasar de mi mente, con o sin coherencia, se pensó en compartir una idea bajo el punto de vista de un alma enamorada del AMOR.

1 comentario:

Anónimo dijo...

el amor es maravilloso si es correspondido, a veces se sufre pero tambien te hace feliz